miércoles, 9 de marzo de 2011

Famila de la española asesinada en Colombia acusa a su esposo de contratar a un sicario

  • Cámaras de seguridad registraron el momento en que dos hombres ultiman a la ciudadana española en un local comercial. El material, que ya está en poder de la Fiscalía, fue editado por respeto a los familiares de la víctima.
  • Irene Cortés Lucas fue asesinada el 2 de marzo en Barranquilla.
  • El marido, Farid Llinás Ariza, asegura que es inocente.
  • La familia cree que Llinás la convenció para irse a Colombia y "deshacerse" de ella allí.
En un vídeo grabado el miércoles 2 de marzo se mostró cómo dos hombres llamados Juan Carlos Guerra y Bryan Darío Blanco accedieron a 'La plaza de la cerveza', un local del sur de Barranquilla. Se sentaron junto a la mesa en la que se encontraban cenando la malagueña Irene Cortés Lucas, su marido Farid Llinás Ariza y otros tres acompañantes, primos de Ariza.
Un camarero se les acercó para apuntarles lo que querían para tomar. Acto seguido, los delincuentes sacaron una pistola y un cuchillo y se dirigieron a la mesa donde estaba Cortés Lucas. Tras unos pocos segundos en los que parece que les quieren quitar los objetos de valor, uno de ellos dispara a la joven española.
Tras el delito los asesinos salen corriendo del local con el bolso de Irene, suben a un vehículo y escapan. Acto seguido, los acompañantes de Cortés Lucas y su marido la llevaron a un hospital estando viva todavía. Sin embargo, no consiguieron salvarle la vida.
LA FAMILIA SOSPECHA DEL MARIDO
La familia de la fallecida Irene Cortes Lucas, asegura que su marido el señor Farid Llinas tiene que ver con el asesinato de su mujer, Juan Antonio Cortes el hermano de la fallecida dice en el noticiero Europa press que no considera que este asesinato sea consecuencia de un atraco según a dicho que Irene y su pareja NO se llevaban muy.  desde que esta mantuvo una relación con otro hombre cuando su marido estaba en prisión cuenta que esto pudo a ver si do por venganza de el señor Farid , convenciéndola de venir a Colombia mas precisamente a su ciudad Barranquilla. Pedro Lucas, el tío de la asesinada dice que el marido Farid, le saco de la maleta 2.000 euros una parte para pagar supuesta mente un pasaporte falso ya que no podía salir de España y la otra para pagarle a los sicarios.
EL MARIDO SE DEFIENDE


El marido de la española asesinada en Colombia denuncia amenazas y pide protección
El marido de la española asesinada el pasado 2 de marzo en la ciudad colombiana de Barranquilla denunció hoy que ha recibido amenazas de la familia de la víctima, que lo acusa de planear el crimen, y pidió protección para poder regresar a España con sus hijos.

Farid Llinás Ariza asegura que él es inocente. Además, pide protección policial porque según aseguró a El Mundo, está amenazado de muerte.
"Todas las pruebas están ahí y yo no tengo nada que ver, todo fue un atraco que desgraciadamente se llevó a mi mujer, a la señora que amo", dijo al diario.
Ariza no entiende por qué la familia le acusa. Asegura que es mentira que la llevara engañada a Colombia.
El cuerpo de Irene será repatriado a Vélez-Málaga y Ariza asegura que irá a España porque no tiene nada que esconder.
"Me dicen que me queda poco tiempo de vida, que me van a cortar el cuello. A mi madre, que vive en España, también la han amenazado", contó Farid Llinás Ariza, de 34 años, en una entrevista con Efe en Barranquilla.
Sostuvo que es "totalmente falso" que contratara a un sicario para asesinar a su mujer, Irene Cortés Lucas, de 30 años, como afirman los familiares de ella, y subrayó: "¿Cómo voy a mandar a matar a la mujer que amo?"
"Ellos (los familiares de Irene) no pueden tener más dolor que yo, ¿cómo les va a doler más su muerte a ellos que a mí?", añadió.
Cortés, madre de cinco hijos y residente en Vélez-Málaga (Málaga), llegó a Colombia el pasado 27 de febrero en compañía de su esposo, natural de este país, para disfrutar del popular carnaval de la ciudad caribeña de Barranquilla.
En la madrugada del 2 de marzo, la pareja y unos amigos fueron víctimas de un atraco en un bar del sur de Barranquilla, donde uno de los delincuentes disparó en el pecho a la española, quien murió poco después en un hospital de la ciudad.
El presunto asesino de Cortés, que se identificó como Brayan Darío Escorcia Blanco, fue detenido poco después gracias a las imágenes del atraco grabadas por las cámaras de seguridad del bar y pidió perdón por lo sucedido.
El segundo implicado en el atraco, un joven llamado Juan Carlos Guerrero, fue detenido también horas después.
Desde España, los familiares de Irene han denunciado con insistencia que ella viajó engañada a Colombia, que su marido planeó el crimen y "contrató a un sicario" para matarla.
Según los familiares de la asesinada, Irene y Farid tenían problemas desde que ella mantuvo una relación con otro hombre mientras él estuvo en prisión por tráfico de cocaína "y desde entonces le juró venganza".
Sin embargo, Llinás, que reside en España desde hace 10 años y se casó con Irene hace cinco, mantiene que fue ella quien insistió en ir a Colombia para conocer el carnaval de Barranquilla, a pesar de que él quería retrasar el viaje "porque no había dinero".
Además, asegura que en su momento perdonó la infidelidad cometida por su esposa y que ambos tenían muchos planes para el futuro, como llevar en las próximas vacaciones a París a los cinco hijos de Irene, dos de ellos fruto de su relación con el colombiano.
"Pienso volver a España muy pronto, en cinco o 10 días. Pido que las autoridades españolas protejan mi vida y mi integridad a mi regreso", dijo Llinás a Efe.
Reiteró que teme por su vida y por que sus hijos queden huérfanos de madre y padre.
Mientras, los trámites para repatriar a España el cuerpo de Irene, también condenada hace tiempo por tráfico de drogas, aunque recurrió el fallo, siguen su curso y son tramitados por el consultado español en la ciudad de Cartagena, vecina a Barranquilla.

DELINCUENTES, EN LA CÁRCEL
Los autores del crimen fueron detenidos horas más tarde. Ahora Juan Carlos Guerra y Bryan Darío Blanco aguardan en la cárcel de El Bosque de Barranquilla una sentencia de entre 40 y 42 años que les rebajarán a la mitad por haber confesado. Manifestaron que el arma se disparó de forma accidental, que no fue su intención causar daño. Pero eso es algo que no cree la familia de Irene y esta en investigación,